Tuesday, 10 December 2013


the computer exploded in my throat.  all the words and numbers and symbols, meanings and no meanings were thrown in so many directions of my neck that this became swollen and threatened with choking me for a  fraction of a nightmare in that  misty morning of september no periods no commas no capitals just sheets and sheets of  words covering me like the egyptian mummy i once was or was i a yugoslavian ancient goddess or did no spirit come to my rescue ?  anyhow, the computer keeps bursting and exploding and vomiting words and sentences in my face without  control how come meaning has a meaning in these circumstances then?

 

el com-puta-dor no el ordenador porque no me ordena nada explotó en mi garganta  todos los números símbolos  significados no significados y significantes  volaron en tantas direcciones dentro y fuera de mi cuello que éste se inflamó y amenazó con ahogarme por una fracción de pesadilla en esa nebulosa mañana de septiembre sin puntos ni comas ni mayúsculas sólo hojas y hojas de palabras cubriéndome como la momia egipcia que una vez fui ¿o era yo la ancestral diosa yugoslava o no vino ningún espíritu a rescatarme? no importa el com-puta-dor sigue estallando y explotando y vomitando palabras en mi cara  sin control ¿cómo es que el significado tiene significado en estas circunstancias?

 

Consuelo Rivera-Fuentes

Adderley Lodge Farm, diciembre 2013

Thursday, 5 December 2013


“¿Qué hay detrás de un sobrenombre? Qué o quién lo define?”
Análisis de El Agente Secreto, cuento ganador del Concurso de Relatos organizado por "Casa Salvador Allende" 2013
Consuelo Rivera-Fuentes

Así comienza el relato del cuento ganador de este concurso. Aunque tiene solamente dos páginas, es un relato completo con un conjunto de situaciones, personajes y memoria colectiva que fluyen satisfactoriamente.

La vida real es un fenómeno continuo, sin principio ni fin. En cambio, fabricar un cuento supone cortar una parte de ese fluir y otorgarle sentido. Ese sentido, en el caso de Agente Secreto se ha logrado con una trama directa y un hilo conductor que se comporta como el flash de una fotografía; no hay nada que distraiga la atención del lector hacia otros caminos. Como dice Cortázar, “irse por las ramas es un privilegio que solo puede permitirse en la novela”. La narradora de Agente Secreto se mantiene fiel a este principio y no se va por las ramas, porque este es un cuento y no una novela. Todo lo que pareciera ser divagación, es en el fondo un hilo más que teje el conjunto completo como una tela de araña; todo está conectado; nada es superfluo. Agente Secreto no se dispersa; tiene suspenso y un desenlace inesperado en pocas páginas, es directa, plantea el núcleo, va al conflicto y al desenlace, que además sorprende o emociona.

La idea que se repite o ‘leitmotiv’ en este cuento es al acto de nombrarse a una misma. La narradora, nunca da el nombre que le fue asignado al nacer. En un acto de auto-nombramiento decide esconder trás el apodo de K-29 a una niña temerosa, que “pretendía de algun modo llegar a ser fuerte y valiente”. 

El descubrimiento de nuestro “yo” y la exploración de nuestras múltiples identidades es una tarea importantísima cuando estamos en la etapa de pasar de la infancia a la adolescencia. Parte de ese descubrimiento del “yo” incluye el acto de darse un nombre diferente al que nos dieron al nacer. Y a medida que avanzamos en nuestro desarrollo, los nombres que nos asignamos adquieren significados y connotaciones que nos describen y definen a nuestro modo, y no al modo de nuestros padres. De la misma manera, la narradora de Agente Secreto se rebela contra su nombre original y se asigna uno que se acerca más a la persona que ella cree que es. Así, nos cuenta con lujo de detalles cómo surge su apodo más querido y nos introduce al mundo mágico de revistas y cuentos  infantiles  como “El Peneca” donde Sandokan y Los tigres de la Malasia, Quintín el aventurero y por supuesto, Corazón Valiente, se daban por entrega, por capítulos. En este solo acto de nombrar estos cuentos, la narradora  lleva al lector o lectora de vuelta a una infancia y adolescencia en que la lectura era lo que nutría nuestra imaginación y creatividad. La descripción de sentimientos de ansiedad y estado de inquietud que su cuerpo experimentaba cuando llegaba el día de la salida semanal de esta revista, está muy bien lograda y nos  identificamos plenamente con esa espera; nos metemos en su cuerpo y en su imaginación.

La finalidad de muchos de estos cuentos y aventuras, nos dice,  era hacer justicia. En su caso y en su imaginación, la narradora infante y adolescente se sumerge en la intriga y misterio de otros personajes - no tan infantiles - al estilo de James Bond, el FBI, etc. La sola transgresión de autonombrarse K-29 - un arma poderosa – nos da indicios de lo que será más adelante; una luchadora que busca justicia.  Dice: “A K-29 le correspondía, como a Don  Quijote ‘desfacer entuertos’. Luchar de manera implacable contra los fascinerosos responsables del mal en el mundo y enfrentarse sin temores a los poderosos molinos de viento”.

Cuenta sus aventuras en las que era acompañada de su hermano, que también en búsqueda de un “yo” diferente; se autodenomina “Zorro”. Con él, compite para superar el miedo, imponerse al terror, a la sangre y al dolor físico. K-29 nombre ficticio - pero muy real en su búsqueda de identidad  - le sirvieron para que muchos años más tarde pudiera superar y sobrevivir el horror de la tortura física y sicológica - muy real esta vez.    Esta tortura la experimentó en el Cerro Chena, uno de los tantos centros de detención destinados a deshacer, fragmentar, y hacer desaparecer la existencia y personalidad de los opositores al regimen dictatorial chileno. Mientras era torturada, K-29 le daba fuerzas, le susurraba subversiones al oído para hacerla sentir entera y poderosa, aunque fuese solamente en su imaginación febril.

K-29 representa, para mí, la salida, el vuelo de su imaginación de una situación real de terror, dolor y surrealismo puro. Y tal vez por eso, el autor o autora, la revive y deja plasmada en este cuento. ¿Es por eso, tal vez, que el seudónimo usado es SIEMPRE VIVA? Le dejo la respuesta a los lectores.

Monday, 23 September 2013

CHILE EN LA MEMORIA: 40 AÑOS DESPUÉS DE LA DICTADURA.


El TALLER LITERARIO DE MUJERES HISPANOAMERICANAS DE LA MEMORIA  es un grupo que hace 4  años se inició con mujeres hispanoamericanas de una vasta riqueza musical y literaria; artistas visuales y filósofas e investigadoras. Algunas han vivido en forma directa  el exilio siendo víctimas de la dictadura chilena.

El taller está integrado por dos chilenas, María Eugenia Bravo y Consuelo Rivera-Fuentes, ambas con una riqueza muy profunda en la literatura, no solo por sus vivencias personales del exilio, sino que por su formación académica. Sofía Buchuck de origen peruano, con estudios en literatura y música es una voz que también nos cuenta sobre la memoria y el éxodo, sobre la identidad latinoamericana y sus raíces. Mabel Encinas de México, con una voz propia habla por su poesía de la migración presente Latinoamericana; es además académica en estudios de filosofía y educación, Isabel Ros López poeta y cantautora española, tiene en su haber sus composiciones, así como su poesía y en ellas habla sobre procesos de dictadura y la voz de aquellos que desde todos los rincones buscan la libertad. Marijo Alba, española irreverente, libre y con mucho talento poético nos cuenta en sus obras la realidad de muchos sobre la subsistencia en la vorágine de esta ciudad londinense.

 Nuestro trabajo se concentra en talleres quincenales donde nos enfocamos en crecer, técnicas, literarias y narrativa. A veces terminamos en tertulias alegres con canciones y rituales; pero lo fundamental es la literatura. Tenemos además un retiro anual fuera de Londres, donde nos nutrimos con talleres diversos de salud, literatura, naturaleza, cine, charlas y conversatorios, pero también buena comida, un arte culinario que sobrepasa nuestras expectativas. Una vez al año por lo menos hacemos una presentación estelar única con obras que realzan la Memoria a través de la literatura y el arte en general, como el canto y las artes plásticas.
CHILE EN LA MEMORIA
LONDRES.

Chile en la memoria, fue un evento que se realizó como parte del mundial  homenaje a los 40 años después de la dictadura en Chile.
Sin duda los hechos que remecieron el mundo en Chile en 1972 nos dejan en la memoria la brutalidad con que arremetió la dictadura Pinochestista en contra del pueblo chileno.  Las vidas de miles de personas se perdieron o las hicieron desaparecer y con ello intentaron matar la alegría en símbolos como Víctor Jara, Pablo Neruda, pero también en el niño, el joven, el anciano, la mujer y  el exiliado que dejando su patria tuvo que partir para siempre.
Estas y otras memorias similares marcaron para siempre el imaginario colectivo, por que la dictaduras se expandieron en toda America Latina matando el mismo sueño y en menor o mayor grado lo sufrimos a lo largo y ancho de todo el continente.

 
Este año (2013) entregamos nuestra ofrenda a la memoria de Chile y contamos con el auspicio de Chile 40 Years On, el Bolívar Hall y otras organizaciones .

 En el evento escuchamos los poemas de Consuelo Rivera-Fuentes en los cuales se sintió la muerte de su primo, la memoria de lo que significo el sueño del obrero chileno, el amor la vida y el corte brutal de ella. El inicio del evento estuvo marcado por la marcha hacia el escenario de el Taller acompañadas por el coro de niños Expresión Inka cantando “El pueblo unido ,jamás será vencido” y llevando pancartas. Esto impactó por la sorpresa, la emotividad de todo lo vivido en la dictadura chilena.  El público también se unió con sus voces y así empezamos a recordar momentos trascendentales en  Chile.

 María Eugenia Bravo nos compartió poemas de su libro “Oración en el Estadio de Chile”, sus vivencias como prisionera política, sus poemas de agradecimiento al Reino Unido por todo lo entregado, además de su poema “Todavía no sé tu nombre” dedicado un compañero de prisión a quien torturaban mientras ella estaba detenida.


Isabel Ros López nos compartió una hermosa versión de “Te recuerdo Amanda” del compositor chileno Víctor Jara, una versión muy suave y sentida que todos pudieron sentir como si tocaran las alas de una mariposa. Además compartió con nosotros otra canción de su propia autoría titulada “Dictador” – compuesta inicialmente durante  la dictadura en España con Franco y terminada durante la detención de Pinochet en Londres.

 Marijo Alba hizo poema la canción de Víctor Jara “La luna está linda”, y leyó poemas de su propia autoría que nos deleitaron en una  exploración de la poesía y la musicalización de uno de los símbolos de la lucha en Chile.

Sofía Buchuck cantó el manifiesto de Víctor Jara junto al músico Andrés Caro, una nueva reinterpretación con un aire más soslayado que el público apreció, en una voz que también se detuvo para transmitir este hecho tan histórico y a la vez premonitorio del cantautor antes de su muerte. Seguidamente leyó un poema dedicado al exilio que titulaba “Los adioses” para culminar con una propia interpretación de “Gracias a la vida” junto al cajón peruano, con aire más alegre al estilo de la marinera peruana, que próximamente se presentara en versión grabada.

 Mabel encinas nos regaló dos poemas hermosos, uno dedicado a su padre, llamado “La distancia más corta” en el que nos habla sobre el amor que según Mabel, es la distancia más corta entre un padre y su hija, además de un poema a la esperanza con la dulzura de una fruta en el existir de un migrante en Londres.

El grupo Expresión Inka cantó junto a las poetas de la memoria el El Pueblo Unido Jamás será vencido. 

 Jamit Horna un niño cantor de apenas 11 años interpretó “Solo le pido a dios” canción que pide a la humanidad un poco de esperanza.

Mujeres de la cosmovisión Andina Amazónica colaboraron con el ritual a la luna y la Pachamama como un vínculo que rescata la espiritualidad de nuestros pueblos de América, en un sanación energética después de tanto dolor.

Eduardo Embry, poeta chileno, que vive en Southampton vino a acompañarnos con un poema maravilloso sobre la pérdida de los sueños.

  Luis Muñoz, escritor chileno, nos compartió extractos de su libro On Being Luis, que relata su experiencia de participación en el MIR bajo dictadura y de cómo el escribir sus experiencias le ha servido como un talismán para poder salir de la sombra después de la tortura.

Y luego se le rindió un homenaje al compañero Sergio Lagos, chileno, exiliado en Londres. El representa a todos esos hombres y mujeres que han luchado porque los DDHH se respeten y su violación sea denunciada. Esta lucha y denuncia incansable logró, por ejemplo, que Pinochet fuese detenido en Londres. Sergio Lagos representa a este grupo humano de hombres y mujeres que aún perdiendo su terruño, sus hijos, sus padres; lanzados al exilio  siguen luchando. El nos ha enseñado sobre  solidaridad con las luchas de la comunidad Latino Americana en Londres. Esa noche, y con palabras muy sentidas sobre la dictadura,  nos inspiró a seguir luchando, como Allende, Bolívar, Chávez y mas.

 Hubo mucho que celebrar y compartir,  agradecemos a Apolo Santana quien nos puso en contacto con Chile 40 Years On, al companero JC de Ecuador, al Bolívar Hall por el espacio, a todos los colaboradores detrás de cortinas, al público en general por asistir y que nos dejaron excelentes comentarios, entre ellos que este show bilingüe debería ser repetido en un espacio más amplio, por la importancia política, histórica y artística que tiene, algo que esperamos realizar más adelante.

 Nos llevamos el dulce sabor de haber podido entregar hechos tan verdaderos y emergentes de nuestra América y en este caso particular de Chile. EL TALLER DE LA MEMORIA espera volver a presentar esta obra más adelante – a pedido del público.





 






 










 










CHILE EN LA MEMORIA
The “Taller de la Memoria de Mujeres Hispanoamericanas” with Marijo Alba (Spain), Sofía Buchuck (Peru), María Eugenia Bravo (Chile), Mabel Encinas (Mexico), Consuelo Rivera-Fuentes (Chile) and Isabel Ros-López (Spain) invite you to a 2-hour evening of poetry and music at the Bolivar Hall in London.

This event is to commemorate the 40th anniversary of the military coup that destroyed the dreams, hopes and lives of millions of Chilean people on 11th of September 1973 and to remember all the detained, disappeared and assassinated during the 17 years of military dictatorship that ensued.
Artists: Taller de la Memoria de Mujeres Hispanoamericanas and their guests: Luis Muñoz, Sergio Lagos, Eduardo Embry, Camila Fiori, Selma Ortiz, Sumaq Killa, Children’s Choir Expresion Inka.

Date of the event: 05 of September 2013
Venue: Simon Bolivar Hall, London
Address: 54-56 Grafton Way, London, Greater London W1T 5DL (nearest Tube: Warren Street), Phone: 020 7387 6727
Contact number for enquiries: 07970386874 (Consuelo) / 07962479636 (Mabel)/ 07958012682 (Sofía)
DATE: 05 sept 2013.
Start time : 19:30 sharp
Finish time: 21:30 sharp

Sponsors: 40 Years On Network, Clwyd Latin American Human Rights Group, Bolivar Hall, Pro Peruvian Art

Friday, 4 May 2012

EL CORAJE DE DECIR: ARENA EN LA GARGANTA

Consuelo Rivera Fuentes (1)

A la memoria de Daniel Zamudio

Patricia Pinto Villarroel.


En nuestra sociedad chilena caracterizada en buena medida por su pudibundez, su opción por las perífrasis, su afán por tender espesos  paños sobre tantas realidades escamoteadas, el efecto del poemario de Consuelo es el  que causaría  un sol de verano alumbrando en plena medianoche de junio. El decir en  Arena en  la garganta estremece por la franqueza con que aborda temas tan candentes como los horrores de la dictadura de Pinochet ( tortura, violación, exilio, hambre, miedo, asesinatos), el amor lésbico, la discriminación, la dificultad para asumirse  como distinta: “El sentido/Se termina/ (La prohibición arde en el aire)/…Tu quejido de placer/ Crece/  Todo mi cuerpo palpita/ Y cuando creo haber tocado el cielo/ Con mis dedos/ El clic de la cordura/ Pone fin a nuestro sueño”  (pp.55-6).
    
     En este Chile de comienzos de otoño del 2012, inmersa en el contexto de las brutales represiones  contra l@s habitantes de Aysén (2); de las  horas de tortura inflingidas a  Daniel Zamudio por su asumida condición homosexual( 3), del fallo de la Comisión interamericana de derechos humanos contra el Estado de Chile por despojar a la jueza Karen Atala del derecho a la tuición de sus hijas por  ser lesbiana, lo que, además, según la Corte,  no se condice con la dignidad de su investidura;  la poesía de Consuelo Rivera destella con su  profunda y dolorosa  vigencia. También destella por su porfía en defender el amor, la solidaridad, la memoria, la palabra  y la esperanza: “Pero en lo más alto de la barca diaria/ Se alza la esperanza del nuevo amanecer.” (“Contradicción”, pp.91-92). Así, entre luces y sombras, se constituye  la amalgama del existir poetizado.

     El libro  se abre con  la portada. Lo primero que vemos es la foto en blanco y negro de una estatuilla de Josie Alexander ubicada en el centro. Representa a una mujer con rasgos un tanto asiáticos, desnuda, excepto por la cinta que adorna el cabello.       Los grandes ojos, casi una línea que deja entrever las pupilas, están semicerrados. Los brazos se cruzan sosteniendo los amplios pechos y destacando el volumen del bajo vientre.  Las piernas están cortadas casi al inicio de los muslos, entre los cuales el pubis, más oscuro, atrae la atención.
      De la estatuilla emana fuerza y misterio. La mirada de los ojos entrecerrados y la posición de los brazos parecen demarcar un radio de distancia y celar la intimidad. La mujer, en su total desnudez, guarda zonas ocultas. Se muestra y se vela. Su cuerpo es poderoso, pleno y maduro. Su rostro no tiene edad.
     
     Su presencia en la portada sugiere múltiples lecturas. Destaco su carácter de diosa de umbral que guarda y a la vez representa el mundo al que entraremos: intenso, femenino, peligroso, desnudo, cifrado. La guardiana también invita, seduce, atrae. (4). Acepto la  triple invitación, --la de la diosa, la de Consuelo Rivera Fuentes, la de María Teresa Torres, la prologuista,--y me aventuro sin corazas en el ámbito que ofrece Arena en la garganta.

Otro eslabón en la memoria feminista chilena.
Una voz de mujer hablando de mujer debe atravesar el olimpo minado de los discursos patriarcales. Nos cuesta hacernos oír y por siglos nos ha costado también decirnos. Nuestra historia de género está rebosante de silencios: secretos silenciados, deseos silenciados, temores silenciados, placeres silenciados, pensamientos silenciados, rebeldías silenciadas…        Proporcionalmente, hemos sido habladas mucho más de lo que nos hemos hablado. “La historia de las mujeres es invisible…” afirma Julieta Kirkwood (5). Y por eso  una de las grandes tareas del feminismo (6) es la de recuperar y contribuir a la memoria genérica. En Chile existe un trabajo importante de recuperación de los discursos de nuestras ancestras y también vamos construyendo un cuerpo testimonial con nuestras propias voces. Así hacemos el camino al hablar, así vamos completando la historia.
     En esta cadena de voluntades y acciones se inscribe el poemario de Consuelo Rivera. Memoria histórica, memoria personal. Rescate de la existencia mujeril, de los Amores mujeriles, --como nombra a  una sección de su libro--, de las hondas amistades entre congéneres.
    El primer poema da nombre al texto. Con “Arena en la garganta” se inicia la sección Homenajes. Es la madre muerta  a raíz de un “cáncer de mamas/ Para mamá” la que arranca el grito de dolor e impotencia de la hija testigo del espanto:" Queman a mi madre/ Cual Juana de Arco/ Lucha aún/ Después de dos años/ De tortura/Química, biológica…/Como una pared de algodón/ La arena en mi garganta/ Se derrama/ Por mi cuerpo/ Me ahogo/ Grito seco…” (20) Ambas mujeres sufren  atroz invasión. La arena y la tortura química - biológica dislocan rutinas y existencias. El dolor físico, emocional y síquico hace presa de las dos y a la postre las separa. La madre muere, la hija la invoca: “Desde donde/ Duermes/ Dame lluvia/ Diluye diez mil veces/ La arena en mi garganta/ Disuelve/ Estos gritos secos/ Quema/ Mi arena, mamá/ Mi pena /De/ ARENA.”(p.20) Es la palabra poética la que logra sobrevivir, la que permite  fijar lo acontecido. Que no se vaya, que no se pierda, parece ser el anhelo que palpita y sostiene al verbo permitiéndole cumplir su doble función de expresar  la pena y de salvar de la muerte-olvido-invisibilidad a la madre vencida. El "grito seco" ha sido capaz de eternizar.
      
    Por momentos la voz se pierde, se ahoga, pero se recupera. En “El anhelo” se plasma este movimiento pendular: " No vi tu cara, madre, pero sentí tu presencia y las voces milenarias. No vi tu rostro, madre, pero saqué mi voz y la pinté en mi mandala…” (25)

          Múltiples inflexiones, múltiples cuerdas las de esta voz cuya  poseedora se reconoce integrante de “las otras”, las rebeldes. Este es el punto de enunciación que jamás se abandona. El poema “Somos las otras” es una asunción pública de tal identidad. Una que se define a contrapelo, que orgullosa rescata y le da una vuelta de ciento ochenta grados a los semas que la cultura patriarcal sataniza. El primer verso “Somos hechiceras…” marca el tono, mientras que los  últimos refuerzan la subversión y el triunfo: “Somos arañas amarillas/ acariciando el conocimiento/ ¡Ese que nubla, llueve y atormenta a la/ Inquisición!”(p. 39) Lluvia que apaga las hogueras de muerte, conocimiento mujeril rescatado con caricias.
   
           El rescate de personas queridas pertenecientes todas al ámbito de la rebeldía es un rasgo relevante de la colección Homenajes. Inmediatamente después de la figura de la madre aparece la de Arinda Ojeda Aravena, a la cual se dedican dos poemas que llevan su nombre como título. Arinda, la compañera que estuvo presa y fue torturada”…ocho años/ Cuatro meses/ Cinco días”.( p.27), la “ amiga del alma, la poeta de la sonrisa dulce y el alma alada…”(p.35) . Consuelo sabe que hay dolores que no se borran, también sabe que las personas tienden a olvidar, a no tener presente lo que perturba, "¿Sabrá nadie todo lo que diste/ En ocho años/ Cuatro meses/ Cinco días?" (p.28). Entonces, es preciso mantener despierta la memoria: “Pero nadie sabe/ Que tu boca duele/ Que tus encías/ Duelen/ Que tus dientes, tu espalda y tus huesos/ Duelen / Las manos, los pies, los puños/ Las patadas, la electricidad/ De los ‘padres de la patria’/ De nuestra tierra tricolor/ Se quedaron estampadas/ Para siempre en tu cuerpo/ En nuestros cuerpos…” (p.37).

                Exactísima la percepción de María Teresa Torres: “Si se me permite la intención de buscar la metáfora global, diría que estos versos vienen y desembocan en el cuerpo. Será el cuerpo el espacio de la ignominia, pero también esa piel recibe el beso, el placer del descubrimiento de amores iguales.” (7)
                  Instalar el cuerpo en el centro de todo  -la estatuilla de la portada ya  anuncia tal intención-, es en sí, un acto subversivo dentro de una cultura como la nuestra en la que el espíritu, el alma, lo sutil e impalpable son los que reciben las valencias positivas, egregias, sublimes. El cuerpo, “el hermano asno” de Eduardo Barrios, es relegado al patio trasero. “La carne es débil”, “el pecado de la carne”, “la cárcel del cuerpo”  y tantas otras expresiones ratifican el desprecio, el minusvaler que le asignamos a nuestra “envoltura mortal”. Al menos en el discurso público. Vaya una a saber la relación que cada persona mantiene con el suyo y el de l@s demás en los ámbitos privados y secretos. (8)

          El cuerpo en la poesía de Consuelo es plurivalente, pero nunca despreciable. Sebastián Acevedo, el que se inmoló por fuego en la plaza de Concepción en un desesperado intento por salvar a sus hijos prisioneros de la CNI, es un ejemplo límite de la relación de un ser humano con su cuerpo, única y última herramienta de amor que le deja una dictadura implacable. “Sebastián, angustiado por la suerte de tus hijos; / Presentimiento fatal recorre tu cuerpo fuerte…/ Sebastián, impregnado de parafina/ Y bencina…/ Sebastián envuelto en llamas/ Pira humana corriendo por Caupolicán…/ Sebastián, ruina asediada, postrada/ En la plaza horrorizada; / Mechón de pelo carbonizado,/ Piel arrugada y encogida…/ Sebastián, vestido de espuma blanca extintora./ Parpadeo sin pestañas,/ Conversación sin saliva,/ Cuerpo sin sudor/…Sebastián, corazón abrasado, recocido/ Dando las últimas campanadas/ Con cadencia de paz eterna./…Caracol subiendo estrellas/ Albañil levantando las luces de la verdad./ Lumbre de increíble amor,/ Brillando para siempre/
En las mentes de las gentes. / Sebastián, fuego de obrero. / Ave Fénix de este Chile despedazado.” (Pp.33-34)

        Tres mujeres más reciben el homenaje de Consuelo: Ivette Malverde: “La dulzura es la misma/ Bajo la boina de lana…” a quien visita “Después de cinco años…”. Las hermanan el cariño, los ideales mantenidos contra todo, la paradoja de nuestra grandeza unida a la fragilidad: “Hablamos de quimioterapias/ Y operaciones…/ Entonces Ivette/ Me dice que le exige/ Al cirujano/ Ese que corta senos/ Que le deje el ombligo/ Porque es la diferencia/ Entre una mujer de plástico/ Y una de verdad” (pp.43-44). Marta Zabaleta, la criolla que le muestra “…la relevancia/ De las palabras/ Si se unen a las tuyas/ Y las de mis hermanas”(p.42). Gloria Garrido, la Gló, “Que habla inglés/ Piensa en castellano/ Y dice garabatos en chileno.”(p.46) que llega desde Chile a Inglaterra y “De  golpe  y porrazo”   le instala en la piel  “Esta hambruna/ De saber qué es de mi país/. (pp.46-47). Amigas, hermanas, maestras, brujas, pensadoras, rebeldes, hermosas mujeres que, como la poeta que escribe, forman parte de las otras.

   La colección se cierra con el poema “¿Gusanos o mariposas?”  En él, como ya lo anticipa el título, convergen dos realidades antagónicas: el horror de las prisiones de la dictadura “ El calor agobiante de los cuerpos unidos/ Por el sudor de la misma hambre/ Y la misma humillación,/ Hace palpitar sienes, Pechos./ Y los gritos de libertad se quiebran/ Con el repiqueteo de las armas mortales/ Caen como pájaros indefensos/ Cortados brutalmente en su vuelo…” y el prodigio de la metamorfosis: “ La  boca maloliente, recibe a dos, tres/ Cientos de gusanos pequeños, / Con carcajadas siniestras./ Pero los primeros que se tragó/ Han tejido sus hilos de seda, firmes,/ Maravillosos/ Se han convertido en colosales mariposas…”(50-51). La asombrosa capacidad humana para procesar el dolor y hacer de él un medio de superación; esa capacidad de hacer brotar la flor en el lodazal, la pureza en el vertedero de basura; es la que se plasma en el poema. Me-nos hicieron tragar gusanos, pero en nuestro interior los convertimos en mariposas. Somos mariposas aladas. Es el triunfo que celebra Consuelo. Ella y su escritura son testimonio vivo del horror de los gusanos y de la perseverancia para vivir como mariposa.

El prodigio del amor

        Hito fundamental en lo que podríamos denominar  segunda vida de Consuelo es el amor encontrado y compartido. Ese amor que “…tiene nombre/ de Mujer”(73)  la redime de “ seis siglos de actuación”(p. 57), acalla las voces que prohíben, llena de gozo el cuerpo  llagado por  violaciones y torturas, acaba con la clausura del ensimismamiento, restaura la energía vital y la devuelve a lo perdido: ..." Olvidé el tabú/ El dolor/ Mi sexo chamuscado. / El éxtasis/ De un orgasmo tantas veces soñado/ Me hace volar/ Con alas invisibles/ A mis hermanos, a mi hijo/ A mi pueblo. /Inyectaste poderío a mi fuerza decadente/ Empiezo a vivir.”(58) Otra vez son posibles la lucha y la solidaridad, el retorno al país que se había convertido en un infierno: …” Volveré a mi país…. / Continuaré mi lucha/ Junto a las desaparecidas/ Las encarceladas/ Las torturadas…/ Porque mi alma que era sólo mía, / Ahora, y gracias a tu ternura de mujer…/ Es de todos nuevamente.”(p.59)

        El sentimiento de liberación es fundamental en estos Amores mujeriles. Títulos como “La liberación de Eva”, “Liberación”, “Ninfas liberadas”, así lo atestiguan. “Definitivamente los pájaros vuelan conmigo/ Y se apoderan del cielo galopando las nubes/ De la libertad. (p.77) se lee en el poema “Vida” que termina con esta afirmación rotunda: “Definitivamente, la amo.”(p.78). Han caído las máscaras, arrancadas por las amantes en el momento del éxtasis. Unidas en la verdad, en la semejanza de los cuerpos, en la ternura, en el placer, se reconocen, se liberan, se aman, alcanzan la dicha y la plenitud.

   “Defendamos nuestro amor/ Con dientes de sirenas/ Dedos de corales/ Senos de amazonas/ Y conjuro de brujas benditas.”(“De los diez el quinto.”(p.68)  Esta es la invitación que se extiende a la amada, la de los ojos verdes, junto a la cual se ha re-encontrado la Vida.

    Terminada esta propuesta de lectura, Daniel Zamudio ha muerto. Resuena en mí la pregunta espantada de Consuelo desde Inglaterra: “¿Por qué”?  Tal vez porque tuvo el coraje de vivir siendo fiel a su diferencia.

      A quienes se creen poseedores de LA VERDAD y del derecho a decidir sobre la vida y la muerte de otr@s, invito a que lean ARENA EN LA GARGANTA.




N O T A S

1.    Rivera Fuentes, Consuelo. Arena en la garganta. Ediciones Escaparate. Colección Poesía, enero 2011, 118 pp.

     2. El llamado conflicto de Aysén, en la Patagonia chilena, surgió en febrero de este año cuando l@s pescadores artesanales de la zona tomaron el aeródromo de Melinka en protesta por un proyecto de ley de pesca que beneficiaría a los grandes industriales del rubro. En el mismo mes se extendió originando el “Movimiento Social por Aysén”  que inspiró 11 demandas presentadas al gobierno de Sebastián Piñera. La ciudadanía de la zona se movilizó tomándose calles, caminos y puentes. La represión policial fue brutal e indiscriminada. Entre los seriamente heridos están Teófilo Haro y Claudio Gallardo, ambos con lesiones de balines en el rostro, esquirlas  alojadas en el cerebro y pérdida de visión.

          3. Los hechores son cuatro jóvenes neo-nazis que perpetran el horror sobre otro joven que ha  tenido la valentía de asumirse como homosexual. Lo encuentran solo en un parque de Santiago y lo torturan usando una crueldad que, al decir del abogado defensor de la familia Zamudio, nunca antes había visto en toda su carrera. Daniel agonizó por 20 días. Mientras trabajaba en  este texto,  el 27 de marzo a las 19:45, falleció. Fue asesinado.)

     4. Imagino que habrá quienes sientan tal rechazo que decidan no penetrar ese mundo suyo.

      5. Este concepto, central en el pensamiento de Julieta Kirkwood, lo desarrolla en sus libros: Ser política en Chile: las feministas y los partidos, Santiago, FLACSO, 1982; Tejiendo Rebeldías, Santiago, Centro de Estudios de la Mujer
y Casa de la Mujer La  Morada, 1987, y  Feminarios, Santiago, Ediciones Documentas, 1987.

      6. En este punto no son relevantes  las diferencias existentes entre diversas posturas feministas.

      7. “La poesía de Consuelo a escala de Mercalli” p.15

      8. Hay una aparente contradicción en lo que digo si pensamos en la exacerbada exposición del cuerpo en muchos programas de la televisión, en diarios, en revistas. Si atendemos a las cada vez más frecuentes cirugías plásticas para mejorar nuestro aspecto, si paramos mientes en los múltiples comerciales que ofrecen una enorme cantidad de productos para mantenerse joven, delgada, de dientes blanquísimos, cabellos brillantes y fuertes, vestimenta irresistible, desodorantes que causan enamoramiento inmediato, etc., etc. La contradicción me parece sólo aparente ya que en los ámbitos citados el cuerpo se cosifica, se convierte en fetiche, en objeto de permanente insatisfacción y, por ende, sujeto a deseables  mejoras sin fin.


Peralillo, Valle de Elqui. Abril 2012


Tuesday, 27 March 2012

MUJER KANTU


Tu flor roja, que trepas las montanas,

Hasta alcanzar el sol y ahí…sangras.

Para ti no hay cosa difícil, todo es posible entre tus manos,

Gigantes de amor, gigantes de lucha.

Tu criatura de embates,

y sacrificados siglos,

Flor de los humildes,

espina de corazones malos.


Tu creces desafiante en los pedregales,

En los campos donde aun,

No ha llegado con sus días crueles,

La obscuridad y el dominio.

Aun cuando esta vino,

Arrancar nuestro derecho,

Para arrastrar consigo,

El dolor de nuestros hermanos.

Andamos desde entonces,

Por los cerros y quebradas,

Gritando nuestra desventura,

A los cóndores, a los águilas,

Únicos sabios en escucha,

En pintar nuestra voluntad.


Para luego volar con ellos,

En majestuosos paseos,

En vuelos atrevidos… heroicos.

Sin embargo nuestro Corazón,

Es una rosa de tiernos pétalos,

Es un volcán de epopeyas,

Justas e históricas.


El sol te irradia fortalecido,

Para despertar en ti,

El capullo de una nueva aurora.

O el rayo que rompa,

Todo el silencio de tu destino.

Mujer tu eres el manto,

De protección y dulzura.

El río sagrado,

Con quien se conversa apacible.

Pero cuando en ti vierten,

Lo injusto y la barbarie.

Tue res el mar rugiente,

Que golpea las rocas,

El viento que brama,

y silva en silencio.


Mujer esencia preciosa,

Donde la creación acontece.

Aun te fue prohibido

Llamar con tu propio nombre,

A los frutos de tu vientre.


Según la voluntad de quienes,

Pusieron las cosas de cabeza.

Pero nuestras lagrimas no serán mas ríos,

serán desde hoy

el mas bello sereno

de claridad y razón.

Mujer eres luz entre las tinieblas,

Y no la hoja que el viento trae lleva

Y luego tira.

Tu semillero de retoños,

Fuerza natural de las raíces.

Eres la mágica melodía que poderosamente emerge.

Eres luciérnaga en floresta,

Hermana fértil de la selva.

Eres el rocío tierno

Y el fuego calido.


Mujer tu eres Kantu.

KANTU: Nombre Quechua de una flor andina (Flor nacional del Peru)que crece en las montanas, y sangra con los rayos del sol.

Publicado en el poemario: VOCES Y SILENCIOS 1994 Xerox publisher London.

Antologias varias.


Sofía Buchuck Londres 1999.

Clika en el titulo de abajo para ver en version video.

MUJER KANTU





Monday, 26 March 2012

LADY ROJAS EN LONDRES- VISITA Y CANTO










Por Claudio Chipana G.

Del 22 al 28 de marzo tuvimos la grata visita de Lady Rojas, crítica literaria, poeta, y profesora de la Universidad La Concordia en Montreal, Canadá. El Café filosófico Encuentros Latinoamericanos de Londres junto con el Taller literario de escritoras hispanoamericanas de la memoria organizaron la presentación en la ciudad de Londres el libro de la profesora Rojas titulado “Canto Poético a capella de las escritoras peruanas de 1900 a 1969” (*). Este evento tuvo lugar en la embajada peruana de esta ciudad, el mismo que generó primero, y colmó después, las expectativas de mucha gente interesada en el devenir literario del Perú y Latinoamérica.
Tal como lo explica la propia autora de “Canto poético a capella”, éste es un libro que busca rescatar a muchas escritoras peruanas que en los primeros 60 años del siglo XX han producido poesía, pero que han permanecido en el olvido o han sido simplemente ignoradas por la academia y la crítica. Esta última, escasamente, ha consignado la presencia de estas escritoras en las antologías o en la lista de los consagrados en virtud de que dichas escritoras no obedecían al canon literario establecido.
En palabras de la propia autora: “esta investigación crítica parte de una constatación evidente: la falta de material sobre las escritoras de principios del siglo XX en los manuales de literatura hispánica y la ignorancia de su labor estético-cultural.” Y agrega: “La historiografía y la crítica literaria han sido muy parcas en el Perú para demostrar no sólo la irrupción de las mujeres en los campos laborales y artísticos sino su papel como agentes sociales de cambios fundamentales en la historia.” (2010 p. 15)
Sin embargo, la presencia de Lady Rojas en Londres y en las otras partes de su periplo literario en Europa, desbordó lo meramente académico. Lady nos transmitió sus inquietudes, experiencias y nos hizo participes de su arte poético. Supimos más de ella como investigadora, escritora y como mujer inmersa en la diáspora peruana en Montreal. También hizo una presentación adicional para el Café filosófico de un recital poético en el South Bank Centre donde compartió con nosotros algunos poemas de su libro en edición bilingüe francés/español “Étolile d’eau, Estrella de agua”. De aquí extraemos el poema ¿“Y quién es ésta? y elegimos la línea “yo soy una montaña de ichu”. Hay, pues, una cuestión de género pero también de identidad cultural. En la creación de Lady está presente la mujer como individuo concreto, la mujer con sus raíces, la mujer escritora, la migrante, la mujer como objeto que busca ser sujeto de sí misma.
La poesía y la escritura ensayística de Lady Rojas, a todas luces, no están desligadas la una de la otra. De la misma manera que su poesía trasunta una voz comprometida con su tiempo y sus circunstancias, el libro “Canto poético” busca ser un testimonio y a la vez un grito en el cielo para expresar la valía y presencia de la escritura femenina injustamente acallada.
Lady Rojas habla con deleite y acuciosidad de las mujeres poetas incluidas en su estudio, entre las que figuran Mercedes Cabello de Carbonera, Magda Portal, Angela Ramos, Helena Aramburú Lecaros entre otras escritoras; pero a la vez, nos invita a prestar particular atención a aquellas autoras que han merecido escaso o nulo interés de parte de la crítica, como es el caso de María Jesús Alvarado, Adela Montesinos o el de Serafina Quinteras. El hecho es que todas estas escritoras, de un modo u otro han cuestionado el orden social existente, patriarcal y oligárquico.
La particular valoración de María Jesús Alvarado y Adela Montesinos, como nos dice la profesora Rojas en su libro “Canto poético a capella” se debe a que “sus discursos vanguardistas, antipatriarcales, y dialogantes establecen las bases ideológicas del Feminismo peruano. Alvarado Rivera – a quien Lady Rojas ya le ha dedicado un trabajo anterior - es la primera escritora feminista en el Perú del siglo XX que se pasó la vida protestando contra todo tipo de yugo e intercediendo por una nación democrática y moderna que incluyera en su seno a todas las mujeres y a los indígenas.” (2010 p. 133)
Una virtud innegable de “Canto poetico a capella” es que su estructura nos permite visualizar la relación entre la creación poética y el entorno económico y social que subyace a la actividad creadora. El libro se compone de 3 partes, siendo la primera dedicada al contexto histórico, la segunda, a la producción poética de las autoras estudiadas, cerrando con varias entrevistas entre las que destaca la efectuada a Blanca Varela. Precisamente, Blanca Varela por todos sus méritos literarios, a menudo, como nos lo recuerda Lady Rojas, resulta ser una solitaria representante en las antologías de poetas entre los que sólo se cuentan representantes masculinos.

Lady Rojas, como crítica literaria y poeta, por la metodología mostrada en su libro “Canto poético a capella”, nos recuerda constantemente que la creación literaria responde a determinadas condiciones históricas y sociales, y en particular a las aspiraciones, a las luchas, las reivindicaciones, y a la necesidad de expresar una voz. Escribir es romper el silencio que oprime y degrada la dignidad humana.

De suerte que la empresa intelectual que lleva adelante nuestra autora es la de rescatar a las mujeres escritoras, romper la desigualdad de género aún persistente en la sociedad peruana y latinoamericana. La voz de Lady es una voz actual y viva, es una voz que canta junto con las mujeres escritoras que la antecedieron en el mismo propósito. Si bien ya hablaron autoras como Flora Tristán o Clorinda Matto de Turner, sin embargo, el mensaje que Lady Rojas nos trae es que aún hay mucho por hacer para rescatar a otras mujeres escritoras mas recientes, y así generar las condiciones para una sociedad más igualitaria.
La visita de Lady, al final, nos dejo una grata y honda huella. El café filosófico celebra que haya participado junto con el Taller de escritoras hispanoamericanas de la memoria en la presentación en tan importante trabajo con el auspicio del consulado peruano en Londres. “Canto poético a capella de las escritoras peruanas de 1900 a 1960”, nos cabe la certeza, se colocará como una contribución importante al conocimiento de las escritoras peruanas olvidadas del siglo XX, y al mismo tiempo será un hito en la construcción del feminismo peruano.
Por qué no decirlo, este trabajo fundamental de la profesora Rojas nos trae a la memoria el libro de la crítica británica Jean Franco “Plotting women“ para el caso de las escritoras mexicanas que permanecieron en la sombra a lo largo de la historia de México.
A la pregunta de la filosofa hindú G Spivak: ¿Puede el subalterno hablar? la respuesta que nos trae el libro de Lady Rojas es afirmativa. En cualquier caso, representa un escalón hacia la plenitud del canto de la mujer sin voz y marginada del Perú.
Nuestros agradecimientos a todos quienes contribuyeron a hacer posible la presentación del libro y el recital poético a cargo de nuestra invitada. Las gracias a Mabel Encinas, Sofía Buchuck y a las demás integrantes del Taller de escritoras hispanoamericanas de la memoria, al agregado cultural del consulado peruano Guillermo Pardave, a Gloria Jaliff, Cecilia Abarca, Rosa Delgado y a otras personas cuya colaboración hizo posible estas reuniones.
Entrevista de Lady Rojas para Aculco radio clika aqui:
http://artefactomagazine.podomatic.com/
Londres, 24 de marzo de 2012
(*) Rojas Benavente, Lady, Canto poético a capella de las escritoras peruanas de 1900 a 1960, Editatú editores, Lima 2010.